El 20 de mayo de 2020, a las 8:22, escribí el comentario:
Entre rosas y oropéndolas, no faltan cucos que roban nidos ajenos. Los picapinos a su labor y no les faltará un pajarraco que les pida un mójate en nuestro charco.
En mi paseo, los arbustos de la orilla del río mostraban sus flores a los paseantes autómatas, es nuestra hora, un dos. En otoño habrá escaramujos por ahí, seguiremos paseando, un dos, pero con más calma. Espero.
Ya ve usted, Sor Austringiliana, el día a día de la primavera del coronavirus.
Ahora llueve y cuando deje de llover estaremos ya en verano. Nos debemos una primavera.
ResponderEliminarNos la apuntamos.
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