Las manos de los
canteros atrapan el sol,
para protegerse del frío aliento,
orfebres de piedra y cielo.
para protegerse del frío aliento,
orfebres de piedra y cielo.
Martillos que a Dios reclaman silencio.
(Agustín Merino)
¿Le gusta la foto y el texto, Sor Austringiliana?
http://www.eltiempo.es/fotos/en-provincia-burgos/las-manos-de-los-canteros.html
¿Cómo serían las manos de los canteros que labraron las piedras de las catedrales?
Pues a mí me gustan ambos, foto y texto.
ResponderEliminarBuenas noches, Abejita de la Vega:
ResponderEliminarMe hizo pensar el poema de tu hermano. Volveré, con lo que escribí en borrador.
Abrazos.