lunes, 2 de diciembre de 2024

Sin miedo a los colores


Al caballejo le cuesta avanzar entre los montones de nieve de la calle Fernán González, delante de la puerta de Coronería. Caen gruesos copos y el hombre cuida de sí mismo y de su mercancía, ha de llegar a su destino y no lo tiene fácil. 

Adivinamos los relieves góticos, tal es la maestría impresionista del genial pintor. Es Sorolla y es una nevada imprevista de abril, en 1910. Y aceptó el reto de cambiar la paleta a colores pardos y blancos, aquí no hay mar, ni velas hinchadas al viento, ni niños mojados en la arena, ni naranjales o muchachas con flores. Pero venció, a pesar del frío; se lo cuenta por carta a su mujer Clotilde, qué gran mentora. 

Pintó la Catedral de Burgos con nieve por fuera y con temperatura glacial por dentro: Coronería, Pellejería, la capilla de los Condestables, una imaginaria procesión y un cielo diferente. 

Los canónigos le prestaron un solideo para abrigar la cabeza, qué cabeza la suya. Y qué ojo. 

Ahora podemos contemplarlos en una exposición temporal, en la misma Catedral. No os lo perdáis. Después de retratos de  gente acomodada y paisajes muy valencianos, con naranjas y muchachas de típicos trajes floridos, giramos y nos colocamos ante la austeridad pétrea de la Catedral de Burgos, con nieve y cielo gris, un contraste que nos hace gozar aún más de la pintura de Joaquín  Sorolla.

Ya ve, Sor Austringiliana, sin miedo a los colores.


María Ángeles Merino

https://catedraldeburgos.es/2024/11/27/todo-listo-para-la-inauguracion-de-pintar-sin-miedo-joaquin-sorolla-y-la-valencia-de-1900/