Ayer, al salir de casa, me miré en uno de los viejos espejos del vestíbulo, hice la foto y me preguntaba si el número de imágenes reflejadas sería infinito.
Un espejo dentro de cada espejo, una mujer de abrigo gris y gorro rosa miraría a otra igual que, a su vez, miraría a otra, a otra, a otra, y así hasta el infinito. La mujer cada vez más lejos y más pequeñita. Algo que solo se le ocurre a ignorantes en física, como yo.
Busqué en "Alicia a través del espejo" , la del País de las Maravillas, la de Lewis Carroll, no estaba ahí la respuesta. A buen sitio vas a poner la era. La literatura no está para eso, María Ángeles, aunque el autor sea científico.
Un "pitagorín" familiar me da la respuesta, no es así porque el espejo no es perfecto y me facilita una explicación "on line":
"Si tuviéramos un espejo perfecto, las reflexiones serían infinitas... Sin embargo, siempre hay una pequeña pérdida en cada reflexión, principalmente debido a la absorción. Entonces, después de muchas reflexiones, la luz se absorbe por completo y, por lo tanto, las reflexiones terminan...".
( Rajesh Menon , profesor de ingeniería eléctrica de la Universidad de Utah)
No hay espejos perfectos, no hay nada perfecto, nuestro conocimiento del mundo es más que imperfecto, pero es sano hacerse preguntas. Salí a la calle, con mi gorro nuevo, rosa.
El "pitagorin" refunfuñaba: "estos de letras...".
Ya ve, Sor Austringiliana, una mañana del día de Navidad.
María Ángeles Merino
https://www-livescience-com.translate.goog/physics-mathematics/can-mirrors-facing-each-other-create-infinite-reflections?_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=rq#:~:text=%22If%20we%20had%20a%20perfect,reflection%2C%20primarily%20due%20to%20absorption
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