domingo, 6 de septiembre de 2015

La primera flor quitameriendas

Primera quitameriendas en Fuente del Prior (Burgos)

Mire lo que ha brotado allí, debajo de aquel árbol, Sor Austringiliana. Ya están aquí las primeras flores quitameriendas. Sus pétalos morados y azafranados son heraldos de días cortos con crujidos de hojas secas. Y un poco de frío. Nos preparamos. 

4 comentarios:

  1. Bien sabe vuestra reverencia que esas flores, amarillas y moradas, esas flores que florecen, cuando no florece nada... y a la que una tal Eustasia- vuestra reverencia ya la va conociendo- le gustaba jugar a qué le quitaban la merienda, cosas de chiquillas, ya sabe.

    Le confieso que a una servidora también le atrae y mucho, el ver esas flores que son las del verano ya agostado y del otoño no empezado. No se lo diga a nadie. Es una pequeña frivolidad.

    Toque de tocas de esta que firma: La sor Pardilla

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  2. Perdone, su caridad doña Ele, que me entrometa, pero la Eustasia tenía razón, si abril nos traía las meriendas y las siestas en el campo --abril, bocaditos y a dormir--, la aparición de las primeras quitameriendas en esas eras, ya vacías, en las que solo quedaban montocillos de paja y los suelos fertilizados por sucesivas tornas, anunciaban que se habían acabado las meriendas de pimiento, pepino, tomate y cebolla, que terminabas bebiéndote la vinagrilla de la fuente rebajada con un poco de agua del botijo. Ahora los modernos la llaman ensalada de la era, ya ven, sus caridades, qué cosas.

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  3. Agradecida por la visita de sus caridades, sor Pardilla y seña Carmen, Me gusta imaginar a su caridad, doña Ele, jugando al juego de las quitameriendas, en el verano ya agostado y otoño no empezado. Y jugarían en esas eras vacías que nos pinta la seña Carmen. Al final, el vinagrillo.
    Gracias a sus caridades. Toque de tocas.

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  4. Ya huele a otoño, pero sin lluvia. Un otoño extraño.

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