"Cuando la vida eran cien cañones por banda.
Y todo tan simple como los buenos y malos de mis pelís del oeste.
Y un Dios no tan amable, recogido en un azul catecismo.
Que fácil todo era con 100 cañones por banda.
Viento en popa a toda vela, la vida entraba respirando sin esfuerzo y te llenaba.
Corsario, bucanero terror de los 7 mares.
Y si no eras pirata serías astronauta para pisar Marte, pues la Luna acababa de ser hollada.
Viento en popa a toda vela se fueron esos días.
Y ahora bajo la burlona luna que sobre el gris asfalto rielar no puede.
Vuelve mi canción del pirata.
Con la única estrofa que aún queda en pie.
Y la vida...
Por perdida ya la di cuando el yugo del esclavo ...
Mis ojos se llenan de estrellas o tal vez solo han venido a bañarse en las lagrimas del tiempo
Por cien cañones por banda, sobre el mar de nuestros adentros."
Agustín Merino (texto y fotografía) rinde tributo a Espronceda.
Bien por Agustín.
ResponderEliminarEstá inspirado
EliminarLo mejor es quedarse, siempre, con los sueños y no con la aburrida realidad.
ResponderEliminarSaludos,
J.