viernes, 3 de mayo de 2024

"Cáncer imperátor"

 





Ayer me hice con "Cáncer imperátor", el último libro del medico y escritor burgalés José Antonio Abella. Todavía no estaba en las librerías pero la casualidad me llevó al jardín del Palacio de la Isla,  a la caseta de la editorial cántabra Valnera, en la I Feria de Editores de Castilla y León que acababa de inaugurarse. No sabía nada del libro, fue un feliz encuentro: 

Leí en la contraportada:

"Un imperio ordenado dentro de las fronteras de Epidérmica...Todo parece estar bajo control hasta que un día, con la simple hostilidad de un solo habitante de lo más profundo, se desata el caos. 

En esta alegoría sobre el cáncer...desgrana de manera lúcida y reflexiva su propia experiencia con la enfermedad, aportando la riqueza de una visión dual: la del médico...y la del propio paciente...

En un diálogo directo con la enfermedad, expone, literaria y filosóficamente, aspectos como la esencia antinatural de la misma, los entresijos del enfrentamiento, la posibilidad, incluso, de una convivencia más o menos hostil...Un mensaje de fuerza y esperanza para afrontarlo día tras día, capaz incluso de convertir el miedo y la duda en armas...

  ...una obra que no es de autoayuda, aunque puede ayudar mucho.

Ábrelo y entra en él...lo ha escrito para ti. "

(Nuria Díez Herrán, médico especialista en Medicina Interna)

Tuve una grata conversación con los de editorial Valnera. Hablamos de los libros de Abella allí expuestos, también del último de  Jesús Carazo ambientado en Suances y de las biografías de Galdós y la Pardo Bazán de Germán Gullón. Pregunté qué tal está José Antonio, me dijeron que el domingo 5 a las 12 hará un esfuerzo para estar allí: "Reflexiones con José Antonio Abella". 

A ver...

Ya ve, Sor Austringiliana, el autor de "Aquel mar que nunca vimos". Muy grande, en lo humano y en lo literario.

María Ángeles Merino




jueves, 2 de mayo de 2024

El fuego de las Brontë

Ángeles Caso recrea así la pasión de escribir de las hermanas Brönte, tal vez semejante a la que ella misma sintió y siente: 

 "Escribir era sin duda un acto egoísta, un ansía que llegaba a convertirse en una obsesión, emponzoñando el resto del tiempo, esparciendo el veneno de su totalitario anhelo sobre todas las horas que las obligaciones de la casa, las necesidades comunes o las responsabilidades hacia los demás les robaban a los momentos de la creación, tan intensos para cada una de ellas, tan aislados del mundo y llenos de placer y dolor, como el énfasis de una mística."

(Página 71. Ángeles Caso. Todo ese fuego.)


Eran, son, Charlotte, Emily y Anne. Nada como escribir, las tres y junto al fuego, tras las tareas domésticas y los paseos por el páramo. Así las imaginamos: tres chicas raras del XIX, las hijas del vicario, pobres y feas, con la miel y el veneno de la cultura.  

A pesar de las ausencias familiares, la muerte prematura que las persigue, el recuerdo del internado infernal, el hermano varón adicto al opio, los empleos humillantes en casas ricas, algún amor imposible, la falta de horizontes...

Ángeles Caso se documenta a fondo y se instala con ellas junto al fuego, fuera el páramo con el viento que aúlla. "Todo ese fuego", de escritora a escritoras, no estamos ante una biografía ni novela histórica al uso.

Ya ve, Sor Austringiliana, vivían en una casa parroquial, junto a un cementerio y un arroyo de aguas infectas. 

María Ángeles Merino

https://es.wikipedia.org/wiki/Familia_Bront%C3%AB

martes, 30 de abril de 2024

Para Santa Catalina de Siena...






A los ciclamenes, flor de otoño e invierno, no les gusta mayo, llevan la contraria a los geranios,  y por Santa Catalina de Siena muestran ya sus pétalos "chuchurríos". Empatizo. 

29 de abril, día de una santa que, a la vista de su wikipedia, me cae un poco gorda, mística ella y un tanto intrigante en política, al parecer su mérito principal para la santidad fue devolver al Papa a Roma después de lo de Avignon, qué mujer. Me gusta más la de Alejandría con su libro, su rueda y sus ínfulas de Hipatia pagana cristianizada .

 Que tonterías cuento, qué más da una santa u otra para que sea "tu día", aunque tú lo que deseas es que pase pronto, que la nueva cifra ya la asimilaste desde el año nuevo. Guasaps, llamadas, lo habitual, agradecida. Y alguna amiga del Facebook que lo adivinó, para que luego digan de las redes sin alma.

 Y este 29 de abril se presentaba con la incógnita del presidente Sánchez,  con todos sus defectos  tengo muy claros mis "fantasmas", allá cada uno con los suyos, los respeto. 

Así que, tras un desayuno excepcionalmente dulce, y tras algunas tareas, me pongo delante del televisor, a las once a atrapar las palabras, a ver si... Oigo al joven vecino tras la pared que grita: "bieeeen". No hay que meter en cajones tópicos a nadie, María Ángeles. Calma. 

Y sigue el día, con lo de todos los días, paseo, cocina, compra y  algún extra, más dulce, en mi burbuja familiar.

Y, un poco antes de la siete y media, me acuerdo de que hay una conferencia en la Caja Rural Cajaviva, me pilla cerca y me apetece escuchar al paleoantropólogo Bermúdez de Castro: "De la Trinchera a la Academia". Junto con Arsuaga y Carbonell formó el conocido trío de Atapuerca y ahora es académico de la RAE, cambiando los fósiles por las palabras, pues el diccionario espera que lo alimenten con lexico nuevo, que no tecnicismos. Hay viejos académicos que no les gusta que meta tantas, gente mayor ya se sabe.  Podéis escuchar el vídeo.

https://www.youtube.com/live/XsMudMIMoZQ?si=dJk8h4eLUBrNMsok

A la salida, me llaman la atención dos cuadros muy rurales del pintor burgalés Vela Zanetti. Segadores y vendimiadores, envío las fotos a mi amiga compañera de paseos, casi casi paisana de ese artista. 

Y con otras tareas de siempre, acabó un 29 de abril distinto. Diez mil pasos.

Ya ve, Sor Austringiliana, ya viene mayo.

María Ángeles Merino



viernes, 26 de abril de 2024

"Neuronas para la emoción", Xurxo Mariño.






 Ayer, en el Museo de la Evolución Humana (MEH) de Burgos, el biólogo, investigador y divulgador Xurxo Mariño nos habló de emociones y sentimientos, desde el punto de vista de la Neurociencia, en :"Neuronas para la emoción".

¿Cuáles son nuestras emociones básicas? ¿Es lo mismo emoción y sentimiento? ¿En qué lugar del cerebro viven nuestras emociones? ¿Ha llegado la ciencia a ver físicamente una emoción humana? ¿Hasta dónde ha llegado a ver? 

 Un mundo muy complejo, esa sopa de neurotransmisores alrededor de nuestras neuronas. Las  emociones, no te engañes, por muy racional que te creas, controlan tu vida.

Alegría, tristeza, ira, miedo. Y también amor maternal (de hombre o de mujer), el placer del sexo, de esperar y recibir algo grato... ¿Qué sería de nuestra vida sin emociones? 

Xurxo Mariño nos explica esas cuestiones en su libro: "Neuronas para la emoción". 

Salí del museo y me encontré con la lluvia. Hice fotos a la calle mojada ¿ Emoción?

Ya ve. Sor Austringiliana, la que lían las neuronas.  

María Ángeles Merino

Podéis escucharlo aquí: 

https://www.youtube.com/live/_rkT0mBUnxI?si=RP8FEEa3KavOqnbD


jueves, 25 de abril de 2024

"Con la lengua fuera", Alex Grijelmo.



 Ayer, en Fundación Círculo, con Alex Grijelmo y "Con la lengua fuera. Críticas, chascarrillos y explicaciones sobre el léxico deportivo".

 Y ahí estaba yo, en el palco, una mujer mayorcita que ni papa de fútbol y que, ante un partido en la televisión o en la radio, solo alcanza a  procesar un bonito color verde o unos gritos alborozados.

Fui a escuchar a Alex Grijelmo porque conocía su costumbre de colocar con tino "el dardo en la palabra", como el maestro Lazaro Carreter. Hasta hace poco, buscaba cada domingo su artículo en El País, donde nos ponía en guardia sobre los gazapos que se nos escapan en el lenguaje de cada día o en el periodístico. Era mi sección favorita que, por cierto, desapareció. A saber...

La conferencia de ayer giraba en torno a su último libro, con el mismo título, y aunque fuera "deportivo", es lexico muy presente en nuestra vida cotidiana, podía perfectamente interesar a los legos, como yo. 

No me arrepiento, pasé una hora muy amena e interesante con Alex Grijelmo y la periodista Rosalía Santaolalla. Mucho más que fútbol. 

Palabras con muchas erres, metáforas futboleras, omisión de artículos, anglicismos de los que nadie recuerda el origen, "saltar al campo", "calienta que sales", transistores, hinchas que no fans, corneres, penaltis, largueros, "por toda la banda", "banquillo", la vida misma.

Ya ve, Sor Austringiliana, con la lengua fuera. En una tarde en la cual alguno, tal vez, en un "banquillo", soñaba con un "calienta que sales". 

María Ángeles Merino

https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%81lex_Grijelmo

martes, 23 de abril de 2024

El momento de abrir un libro

 




El momento de abrir un libro nuevo y apetecible es un gran momento, y carambola si es en Día del Libro, aunque para los lectores todos lo pueden ser, 23 de abril u otra fecha. Bueno, sigamos la tradición. 

Esta mañana no tenía muchas ganas de andar, ahí detrás de una rodilla hay un "ay", pero quería dar una vuelta por las casetas que montan los libreros y comprar un libro que tenía en mente: "El niño" de Fernando Aramburu. A la pierna ni caso y salgo de casa mirando al cielo, recuerdo el violento chaparrón de hace dos años.

Andar, ando poco, el Espolón está casi vacío y la gente se concentra en la Plaza Mayor, en torno a las casetas, alegra la vista ver libros y posibles lectores alrededor, como abejas a las flores. Flores, también las rosas son tradición, aquí no tanto. 

 La mañana ha sido buena dice la librera, encuentro enseguida el libro, voy a tiro hecho; lo compro con el correspondiente descuento y no me detengo a mirar otros, hay demasiada gente para andar curioseando, mejor en la librería.

Todavía doy un paseo por el Espolón, comentando incidencias, librescas o no, con una amiga por el móvil. Después me encuentro a una vieja compañera de clase y un ratillo de pegar la hebra al respecto. En el camino, compro el pan y, ya iba mordiendo algún pedacito, cuando me encuentro a un antiguo alumno del centro de adultos que hacía mucho que no veía y... En fin, está claro que además de leer me gusta hablar.

Esta tarde, leo un poco de "El niño": el dolor y la ternura de un abuelo que ha perdido a su nieto. Algunos recordaréis una explosión de gas en una escuela de Ortuella, cerca de Bilbao, con treinta y nueve niños y tres adultos muertos, en 1980. Yo lo recuerdo muy bien, con mis pequeños alumnos del Colegio Domingo de Aguirre, en una misa en la iglesia parroquial de Legazpi, en recuerdo de los fallecidos en Ortuella. Y, como aquel curso, una frase repetida en clase era " seño, que huele a gas". No, las modestas estufas catalíticas de aquellas aulas provisionales no provocaron ningún accidente, pero los niños de Legazpi no olvidaban a los niños de Ortuella. 

Feliz Día del Libro, majos. Sí, también es el día de Castilla y León, feliz día a los castellanos y a los leoneses.

Ya ve, Sor Austringiliana, lectora y charlatana.  

María Ángeles Merino

lunes, 22 de abril de 2024

Lejana y sola




 Escucho al rapero:

 "Soy Palestina, sola me encuentro en la batalla, todo el mundo me ve y todo el mundo se calla. Tengo miedo y me dan hasta escalofríos, murieron mis jóvenes, mueren todos mis críos, sigo sufriendo, sigo sola en esta..."

Una manifestación en mi ciudad, un domingo de abril, Palestina se ve lejos lejos. Vi banderas inusuales entre los plátanos del Espolón, a la hora del paseo, el desayuno tardío o el vermú. 

¿Qué nos cuentan esos bultos  ensangrentados que los de la cabeza llevan en los brazos?

Ya ve, Sor Austringiliana, víctimas.

María Ángeles Merino

Fotos en la Avenida del Cid, en Burgos.