Su reverencia está un poco nostálgica, pero he de decirle que sí, que ese trigo segado, que seguro será moro, se parece muy y mucho a las olas del mar, aunque el primero está nadando en la humedad y el segundo aguanta como puede la sequedad.
Sor Austringiliana qué cosas se le ocurren por estos sitios del Internet. ¿ No estará vuestra reverencia también encantada? Tenga cuidado que hay mucho malandrín o malandrina, vaya usted a saber por aquí sueltos.
Parece un mar de oro, querida Sor, da igual quien sea el encantador.
ResponderEliminarSaludos desde el verano que termina.
Sor Pucela.
Se va el verano y yo sin olas de agua, en enero tal vez.
ResponderEliminarMar de oro, como dice Sor Pucela, con vocablos atinados. El paisaje castellano tiene su belleza; maguer su sequedad.
Un abrazo, amiga pucelana complutense.
Sor Austringiliana
ahhh, ya estamos de vuelta en el interior
ResponderEliminarSu reverencia está un poco nostálgica, pero he de decirle que sí, que ese trigo segado, que seguro será moro, se parece muy y mucho a las olas del mar, aunque el primero está nadando en la humedad y el segundo aguanta como puede la sequedad.
ResponderEliminarSor Austringiliana qué cosas se le ocurren por estos sitios del Internet. ¿ No estará vuestra reverencia también encantada? Tenga cuidado que hay mucho malandrín o malandrina, vaya usted a saber por aquí sueltos.
Inclinamos las cabezas sin chocar las tocas
La Sor Pardilla