Ayer, paseaba entre los castaños de Indias y los plátanos del paseo de la Isla, sobre cortezas crujientes.
Al parecer, se desnudan y es un fenómeno normal, fuera parásitos cuentan por ahí, pero llama la atención y piensas si es normal, si alguna enfermedad, el "estrés hídrico", el cambio climático...
Ya ve, Sor Austringiliana. Como una niña, ponía el pie: cris, cras. Criaturita. Se nos despierta la infancia, aquella primera década olvidada y, de vez en cuando, recuperada. Tal vez la mejor.
Si alguien sabe del tema...Mira que confundir los castaños de Indias con los plátanos de sonbra, ay María Ángeles. Un cartelito, por favor. O un buen tratado de Botánica.
María Ángeles Merino
Fenómenos normales que, por el calor y la sequía, se adelantan y trastornan.
ResponderEliminarQué delicia recuperar gestos de la infancia.
El otoño otoño sí, pero el otro otoño...
ResponderEliminar¡Tiene que llover! ¡Tiene que llover! Decía una canción en aquellos años de la esperada Transición y en en estos tiempos de tanta sequía también tiene que llover y hacerlo con moderación y no de forma alarmante como ocurre en muchos otros sitios.
ResponderEliminarEn fin, sor Austri que este verano, está siendo demasiado seco y tanto los chopos, como los castaños, están pidiendo agua a gritos, pero no hay forma que el Altisimo nos haga caso.
Mejor un poco de lluvia y a ver si pronto utilizamos la rebequita.
Toque sin tocas
La sor Pardilla
Hola, Sor. Seguramente nos hemos cruzado por el paseo de la Isla, pues he estado allí hace poco y para mí es un placer andar a orillas del Arlanzón, sin cuestas y con sombra, arriba y abajo. Incluso tengo "mi" banco en el puente Malatos, donde me siento a leer muchas tardes. Por cierto, los "cachos" de corteza que pisas en tus paseos no son de castaño de Indias sino de plátano. Estos árboles se deprenden así de pedazos de su piel los meses de verano que son muy calurosos, como está ocurriendo este año en Burgos.
ResponderEliminarUn saludo y me fijaré, en futuros paseos por la Isla, a ver si veo a una Sor caminando por allí y pisando pedazos de cortezas de árboles :)
Seguramente, Diego. Los árboles de la Isla me conocen bien, aunque no lleve tocas de Sor. Un saludo.
Eliminar