miércoles, 26 de abril de 2023

23 de abril. Vagalume, Julio Llamazares.




 
El año pasado tuvimos que salir corriendo por la lluvia. Compré en la librería. 

23 de abril de 2023. Este año sol y el último de Julio Llamazares que comienza:

"-A partir de una edad todos somos ya supervivientes."

Como el año pasado, compré por flechazo. Hojeé y ojeé, leí un poco. 

Vagalume, una novela rotando sobre  la necesidad humana de escribir. ¿Para conocernos a nosotros mismos? ¿Para conocer a los demás?

Un periodista se pregunta por qué su viejo maestro en el oficio escribió una novela que no publicaría nunca, el misterio de un manuscrito que llega a sus manos cuando vuelve a la ciudad de provincias de sus años jóvenes, ahora tan conocida como extraña. 

Es literatura sobre la literatura, metaliteratura. Con intriga, creo.

Y como el lector gusta de chapotear dentro de la novela, atrapo las primeras palabras y me las quedo. Sí, aquí una superviviente, ya tengo edad. Adelante, llego a la ciudad provinciana, con el protagonista. Parece que la gente nos mira con extrañeza. Alguna vez llegaré a una población  que fuera mía un tiempo y ya no lo sea.

¿Por qué estoy escribiendo esto, Sor Austringiliana? 

María Ángeles Merino

Burgos

viernes, 21 de abril de 2023

Pareidolia en el pretil del río.



El día tenía mala cara, salí a dar un paseo con el último sol. Alguien había trazado, creo que hace tiempo, una curva hacia abajo  en una bola de piedra del pretil del río. Seguro que la intención del dibujante era que los cerebros de los paseantes procesáramos un rasgo humano, una boca disgustada. Una pareidolia lo llaman. 

Los plátanos del paseo de la Audiencia lucían sus ramitas jóvenes con una pizca de sol, mi cara trazó el gesto contrario a la piedra mal encarada, curva hacia arriba, buena cara. 

A la tarde se le cambió el semblante. Sonreí a la bola de piedra. Me asaltó la tentación de  buscar un rotulador y trazar una curva hacia arriba. No, qué gamberrada, lo dibujé con la imaginación.

Ya ve, Sor Austringiliana, el Paseo de la Audiencia, un día muy frío de primavera. Otro día le cuento un secretillo.

María Ángeles Merino

jueves, 20 de abril de 2023

Zoon politikón



En el Monasterio de San Juan, recibían al Presidente Pedro Sánchez que presentaba la candidatura del alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa. Quise estar dentro. Mi aplauso para los que estábamos dentro y mi aplauso para los que protestaban afuera, sus razones tenían, que el tren directo y el campo no son grano de anís. 

 Es democracia, que no la perdamos nunca, que no haya quien la adultere y la convierta en un sucedáneo. 

Estoy con la lectura de la última novela de Almudena Grandes, Todo va a mejorar, la leo con un respeto especial porque  tristemente no habrá más y valoro su esfuerzo en tan duras circunstancias. Nos plantea una distopía que horroriza todavía más, por su verosimilitud. Desgraciadamente, entra dentro de lo posible la adulteración del sistema democrático. Lo que se dice en estos casos,  creyentes o no: Dios nos libre. 


No suelo hablar de política, sí, habrá quien se extrañe, Sor Austringiliana. Somos animales políticos, como dijo Aristóteles : 'zoon politikon'. No podemos eludir la política, aunque nos irriten tantas veces los políticos. De vez en cuando, es conveniente asistir a un acto de estos. 


María Ángeles Merino estuvo allí. Me pitaron al salir. De acuerdo, es democracia. 

Ya ve, Sor Austringiliana, las piedras del monasterio de San Juan fueron testigos. Como en una serie de televisión del siglo pasado, podríamos decir : "si las piedras hablaran...". No, la gente del siglo XVI no nos entendería. Vivía en una sociedad en que la democracia era una idea imposible, inimaginable.

María Ángeles Merino

lunes, 17 de abril de 2023

Domingo de Ramos. Hosanna.

 



Los "Hosanna" del Domingo de Ramos, hoy, poco tienen que ver con los que imaginamos en tiempo de Jesús, o los imaginados por los autores de aquel Jesucristo Superstar que nos emocionó en nuestra juventud de los setenta. Ahora nos sorprende que pudiera escandalizar a algunas mentes religiosas. 

Ya ve Sor Austringiliana, las cosas de este siglo XXI. En mi ciudad, de frío famoso, el sol primaveral nos sorprende con abrigos y chaquetones rellenos de plumas, animales o no. Religión, no sé. Sugestión, mucha. Deseos de que no todos los días sean iguales, mayormente. 

Los ramos con rosquillas y caramelos de mi infancia, agitados detrás de Jesús y la borriquilla, eran parte de una fiesta. Era un día distinto, sí, con fe, infantil, pero fe. 

Sálvanos. Hosanna. ¿Dónde está Jesús con la borriquilla? 

https://www.youtube.com/watch?v=YlwblhSkRf4


María Ángeles Merino

miércoles, 12 de abril de 2023

Precio de un pensamiento


 ¿Cuál es el precio de un pensamiento?

Ya ve, Sor Autringiliana, por los suelos y faltos de letras.

María Ángeles Merino

martes, 11 de abril de 2023

Perales y recuerdos.






 Ayer, después de un cafecito dominguero y en buena compañía, me acerqué a los perales de Callery que bordean el parque del Doctor Vara.

 Están ahora en su mejor momento, en flor,  y recordaba  los recuerdos de la amiga Marta que jugaba en este mismo lugar en 1959. Ahora no hay clínica ni doctor, ni tapia, sino un recogido parque, un lugar que me gusta mucho y no sólo por los árboles y la fuente. 

Hay lugares que concentran mucho de nuestra biografía, tanto de la buena como de la mala. Y lo malo se torna  bueno con el paso del tiempo que le aporta un nuevo significado. Y lo bueno es todavía mejor.

A veces, los perales no dan peras ni falta que hace.

Ya ve, Sor Austringiliana, los recuerdos buenos o malos.

María Ángeles  Merino

domingo, 9 de abril de 2023

"Resurrección": "incluso en la ciudad, la primavera era siempre primavera".


"En vano se esforzaban cientos de miles de hombres, hacinados en un pequeño espacio, en esterilizar la tierra que los sustentaba, cubriéndola de piedras, para que nada pudiera germinar, y arrancando las hierbecillas que pugnaban por salir; en vano impregnaban el aire con humo de carbón y petróleo; en vano talaban los árboles y exterminaban a los animales y los pájaros porque, incluso en la ciudad, la primavera era siempre primavera."


Fue uno de los primeros libros no infantiles que leí: Resurrección de León Tolstoi. Sé que conservo el ejemplar de Bruguera, 1974, rojo, imitación piel y sobrecubierta de plástico; pero no lo encuentro, debe andar sepultado. 



Recuerdo muy poco de su argumento, sé que había una mujer pobre que lo pasaba bastante mal y un hombre rico que se sentía culpable. Sin embargo, no sé por qué, siempre he recordado el comienzo de Resurrección, su mensaje que ahora diríamos ecológico, que "incluso en la ciudad, la primavera era siempre primavera". 

Como no lo encontraba, lo he descargado. Su lectura me ha atrapado, he respirado el aire viciado de la cárcel de donde sacan a Ekaterina Máslova, culpada de envenenamiento, y, por contraste, el aire con olor a campo de aquella mañana de primavera, en el camino al tribunal, donde se reencontrará con el joven noble militar Dmitri Ivánovich Nejliúdov, el culpable del comienzo de sus desdichas. 

Qué libro, Sor Austringiliana, no me extraña que me gustara tanto. 

Una buena lectura para un domingo de Resurrección. 

Podéis leerlo aquí.

María Ángeles Merino



Siempreviva muy viva. Suculenta.


 Una siempreviva que se mantiene viva desde 2007 , en Campo Real.

Cuando me fui de allí, mis macetas pasaron a manos de Isa. Yo sabía que las cuidaría muy bien.

Han pasado los años, los pajaritos comilones le han dado algún disgusto, pero ahí vive la siempreviva, con sus flores amarillas, haciendo honor a su nombre.

La amistad vive. Ya lo ve, Sor Austringiliana. Como las siemprevivas, hay quien las coloca al lado del ordenador...Suculentas, crasuláceas, a saber.

Gracias, amiga.

María Ángeles Merino

sábado, 8 de abril de 2023

El favorito de los abejorros

 





Es el más cargado de flor y el favorito de los abejorros y moscardones, qué festín se pegan, qué danzas las suyas entre las coronas blancas.

Así lucía una mañana de abril este árbol solitario a la entrada del barrio de San San Pedro de la Fuente, enfrente de lo que todavía llamamos Punta Brava. Sí, junto a la lechera. 

Quería saber, porque siempre dudo con los frutales, qué árbol era. Pensé en bajarme la aplicación esa de Google que lo acercas y te lo dice. Creo que es Google Lens. Pero no hizo falta, una señora me oyó expresar mi duda y nos lo aclaró: un ciruelo.

La importancia del nombre. Ya ve usted, Sor Austringiliana. 

¿O lo que llamamos rosa exhalaría el mismo perfume con cualquier otra denominación? ¿Lo que llamamos ciruelo daría la misma flor y el mismo fruto con otro nombre?

María Ángeles Merino 

miércoles, 5 de abril de 2023

Por el callejón de las brujas
















Mi paseo por el Callejón de las Brujas, la recuperada Calle Embajadores.

Fui en busca de sus pinturas un día de invierno y de lluvia con paraguas ladeado.

No conocí la taberna ni al luthier ni el museo de las llaves.  Nunca fui lo suficiente bruja para frecuentar este callejón, lo conocía de oídas. Un poco santurrona sí, Sor Austringiliana. La brujería va por dentro. 

Los artistas han rendido homenaje al misterio de esta calle, tantos años olvidada en las traseras de Santa Águeda, y a las tres culturas. Y a alguna más, tal vez. 

Convivencia.

María Ángeles Merino
 

sábado, 1 de abril de 2023

El sueño especiero

 Ayer fui a dar la vuelta al mundo, en busca de las afamadas especias. Desde mi ciudad, en una vista del siglo XVI, en la exposición del Arco de Santa María: "El sueño especiero".

Juan Sebastián el Elcano y sus dieciocho hombres al borde de la inanición, en un solo barco de los cinco que zarparon. Y unas cuantas expediciones más,  todas en condiciones inimaginables por lo infrahumanas.  Todo por el sueño especiero. 

¿Tanto era el valor de  un barco cargado de clavo, pimienta y nuez moscada?



Ya ve, Sor Austringiliano, era oro. Cuánto dolor costó ese oro.

María Ángeles Merino